Los «Tanos» de las sierras

Vicente, Leo y Mariano Pernía hacen historia en el automovilismo argentino y celebraron en el coliseo porteño. Los tres han edificado jornadas de gloria, en carreras memorables de la actividad nacional.

Una historia que emociona y para los serranos representa un sentimiento muy especial. «Los Pernía» han lucido en otras disciplinas, y hoy escriben una etapa inolvidable en los deportes mecánicos de nuestro país.
Si bien otras familias han logrado momentos exitosos, este grupo nacido en las sierras bonaerenses está marcando una época. «Tano», dejó la pelota y se subió a un auto de competición, iniciando un derrotero prolífico, peleando con los mejores y calificados protagonistas del T. N. y de los carreteros. Hoy, sus hijos continúan su legado, logrando brillantes desafíos en las profesionalizadas categorías que presenta el país.
El «triunvirato» Pernía, sabe lo que es ganar en el Gálvez. ¿A quien no le gusta subir al podio en la vidriera del automovilismo? Vicente celebró relevantes conquistas en 1988 y 1993, Mariano en el T.C. 2000 enhebró tributos con alto contenido emocional en 2016 y 2017, y Leo hace pocas horas, movió el tablero con un triunfo superlativo en el acto inaugural del Super T.C. 2000.
«Los Pernía» son así. Les gusta el desafío y el esfuerzo, les encantan los retos. Por eso su logros, tienen perfume de talento y amor propio.
En un inolvidable weekend del Súper TC2000, Leonel se tomó revancha superando en gran maniobra a su compañero Ardusso para saltar a la segunda colocación y luego aprovechó el abandono de Agustín Canapino para quedar como puntero y no soltar esa colocación hasta la bandera a cuadros, completando el 1-2 del rombo. «Tenía auto para ganar, solo fallamos en la clasificación. Tenía algo más que Agustín y lo iba a intentar, pero bueno, él abandonó y pudimos conseguir el objetivo. Quería ganar en este circuito tan mítico, se me había escapado por poco el año pasado», destacaba el tandilense.