Historias del TC en las sierras

Por Luis Orlando Sanchez.

Fue el 14 de Noviembre de 1965, algo más de 54 años en el mítico escenario Vuelta a la Carretera de 47,800 Kms, que recorría arterias urbanas de Tandil, las avenidas Rivadavia y Juan B. Justo, rutas 30, 74, 226 y acceso a Tandil por el «El Paraíso», Barrios Los Laureles y el Golf Club, la actual avenida Fleming, para retornar a la zona urbana de aquella época, transitando por las avenidas Brasil y Avellaneda.
En la previa sabatina, los autos cumplían con el requisito de «sellado» y control técnico en pleno centro de la ciudad, en las instalaciones de la ex-concesionaria Tandilco SA en la Calle Sarmiento al 655.
Difícil de imaginar hoy, luego de medio siglo, esas lides e histórias apasionantes.
La 34° carrera de esa temporada, debió postergarse 40 minutos por el tránsito y la cantidad de público que pugnaba por ubicarse en los distintos lugares donde transitaba la 13° Vuelta de Tandil.
Una jornada con buenos resultados para los pilotos serranos, en la penúltima cita en el emblemático escenario, porque un año después ese trazado iba a ser historia.
La cita en Tandil era un termómetro para la categoría más popular del país, porque luego llegaba el Gran Premio que era la fiesta máxima del TC, y un evento extenso que otorgaba un puntaje exuberante con seis etapas.
Una carrera con cambios de punteros, con los Emiliozzi al frente en la primera parte hasta que los «gringos» de Olavarría debieron desertar por problemas de frenos, luego Carlos Walter Loeffel (el recordado tío Fritz) hombre de G. Roca y Marcos Juarez, se afirmaba en la punta y estampaba una notable victoria, promediando más de 170 kilómetros para recorrer 12 vueltas o 573,600 kms de recorrido total.
Gran alegría para los tandilenses aquel segundo fin de semana de Noviembre, segundo era Dionisio «Pichón» Araquistaín, con la máquina que había pertenecido al malogrado «Pocho» Facchini, quien perdió la vida un año antes en el paraje La Porteña. Calificados actores zonales estuvieron en la avanzada teceista, el marplatense Raúl Chavert fue tercero y cuarto el «crédito» de Necochea Armando José Rios, sexto el hombre de Vela y Tandil, «el Chacarero» Aquiles José Rifé (22) con el Ford que había pertenecido al recordado «Cholo» Taraborelli en gran tarea al igual que el «Vasco» Eduardo Luis Usandizaga (21) quien arribó en séptimo lugar, ambos disputando posiciones en escasa distancia, los dos a un giro de Loeffel.
La nota trágica fue el accidente y vuelco del «Nene» Pascuali en la última vuelta antes de La Vasconia, embistiendo un auto estacionado cerca de la cinta asfáltica, pereciendo una joven marplatense.
Una carrera con un marco multitudinario del TC en un escenario inolvidable, un hito para el automovilismo serrano que fue utilizado en once oportunidades. El TC pasó por la puerta de mi casa, recordaban con orgullo muchos tandilenses con el correr de los años.

 

 

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