La espera de Miguel Argañaraz
Cuando el automovilismo retome su actividad en la República Argentina, Miguel Argañaraz regresará al Turismo Nacional Clase 2 estrenando un Toyota Etios de reciente construcción.
Mientras transcurre el aislamiento social, preventivo y obligatorio en la República Argentina, Miguel Argañaraz aumenta sus expectativas e ilusiones. Tan pronto puedan realizarse competencias automovilísticas, el joven piloto residente en Santiago del Estero estará en pista con el Toyota Etios construido por Luis Belloso, bajo planos de Javier Ciabattari y atendido por Nicolás Kern, todo ello coordinado por Luciano Dall´Agata, técnico y responsable general de este nuevo proyecto.
Una prueba en Paraná (Entre Ríos), antes del inicio de la temporada había sido productiva, con parciales y parámetros muy buenos, pero la ilusión de iniciar el campeonato tempranamente quedó neutralizada por motivos presupuestarios, siendo necesario esperar a la tercera fecha del certamen para su reincorporación a la Clase 2, donde apenas disputó tres carreras en la pasada temporada sobre un Renault Clio que perteneció anteriormente a Mariano Morini.
“Una sola puesta en pista tiene el auto, fue en una prueba, suficiente para saber que contamos con un excelente auto. Estoy muy agradecido a Luciano Dall´Agata, quien es el responsable de este proyecto que pronto estará en pista. Bajo su coordinación, el armado del auto por parte de Luis Belloso y la atención del equipo de Nicolás Kern pronto estaremos en el Turismo Nacional. Hubiese querido que sea en la primera fecha pero por motivos presupuestarios habíamos reprogramado correr desde la tercera fecha, esperando la confirmación de la misma por la pandemia”, expresó el protagonista al respecto.
“Tengo muchas ganas que reinicie el campeonato, en mi caso será el comienzo, quiero estar lo más adelante posible aunque asumo que tengo mucho por aprender. Tengo pocas carreras en la categoría, pero seguro me ayudará a mejorar este gran auto que presentaremos en esta temporada. Estoy muy motivado por lo que vendrá, y fundamentalmente agradecido a mi padre, el gran motor y sostén deportivo, que todo esto planificó”, completó Miguel Argañaraz, quien luego de poco más de un año estará nuevamente arriba de un auto de carreras.