Los Emiliozzi pisaron fuerte en Bahía Blanca
Por Luis Orlando Sanchez.
Tan solo 57 años atrás, un 9 de Junio de 1963, se corría el Primer Premio Isaura en la ciudad de Bahía Blanca, puerta y puerto del sur argentino. El trazado utilizado era de una extensión de 83,800 km, se largaba sobre la ruta 3 (vieja) a la altura aproximada de los que hoy es el aeropuerto de Bahia Blanca y de alli al empalme aún existente con la ruta 249, acceso a Punta Alta.
Se ingresaba por la ciudad para unir la ruta 229 y llegar nuevamente a la ruta nacional 3.
Escenario sumamente veloz que a pesar de su paso por la ciudad y con público en las veredas se alcanzó altos promedios, cercanos a los 190 kilómetros.
Uno de esos tramos se utilizó ya asfaltado y ensanchado para correr las competencias en las décadas del 80 y 90, de Punta Alta y Bahia blanca.
Acción en el sur
Un nuevo dominio de los “gringos de Olavarría”, quedaban pocos lugares en donde no hayan ganado los hermanos Dante José María y Torcuato Pascual «Tito» Emiliozzi. La notable serie de victorias continuó en Bahía Blanca y como siempre a elevado promedio.
La carrera se corrió en un triángulo pavimentado, que se recorrió en siete oportunidades, muy veloz, superando los pronósticos respecto a la media final que según Dante Emiliozzi y Armando José Río, manifestaban que iba a orillar entre los 180/185 kilómetros a la hora. La realidad fue 188 kilómetros en la carrera y 190 kilómetros a la hora para la vuelta.
Siempre Bahía Blanca había vivido el TC como final de un Gran Premio, o de una etapa pero nunca una carrera propia y esta fue la primera vez.
Llamaba la atención la diferencia en el clasificador final de 7 minutos 42 segundos entre Dante Emiliozzi, que promediaba 188,046 Kms/H, y el marplatense Antonio Tempone, demostrando el potencial de los ases de la capital del cemento, a pesar de que en las primeras vueltas tuvieron alguna presión de «Pepe» Morán, Eduardo «Tuky» Casa con la preparación de «Manolo» Rodriguez, y el hombre de la cuna de campeones, Carlos Alberto Pairetti.
Destacado trabajo Antonio Tempone, quien fue escalando en el clasificador y finalmente corroboró lo hecho en la clásica Mar y Sierras, con su robusto Ford V8 preparado por Vidosa.
tercero fue el necochense Armando J. Rios, utilizando motores de Bernardo Perez, cuarto el hombre de Villa Luro, Vicente Galuzzo y quinto Jorge Angel Pena. Carlos Pairetti, Nello Marsili y Adolfo Sogolo, completaron el clasificador en la ciudad del sur bonaerense, hace 57 años.