«Hay que capitalizar todo lo bueno logrado este año»
Tomás García Hamilton aún siente bronca por no poder coronarse dentro de la Copa Maxi Rally, aunque no piensa bajar los brazos. “Prefiero tener el auto destruido pero contar con el apoyo de la gente”, afirmó el tucumano.
El dolor y la bronca aún persisten. El vuelco y posterior incendio parcial de su Fiat Palio MR en el Gran Premio 2016 y cuando se encaminaba a consagrarse dentro de la Copa Maxi Rally aún da vueltas en su cabeza, pero antes de repasar lo sucedido Tomás García Hamilton pide la palabra para agradecer. “Ya lo hice personalmente, pero quiero reiterar y agradecer a quienes pararon a ayudarnos a apagar el incendio (Augusto D´Agostini, Javier Montero, Luciano Bonomi y Pablo Olmos). Destaco el compañerismo que hay; ese es el espíritu del rally. Yo hubiese hecho lo mismo, por eso no me llamó la atención. En ese momento, yo me había dado por vencido, estaba como abombado y pensaba que el fuego ya no lo apagábamos. Pero me insultaron un poco y me zamarrearon para seguir y finalmente logramos parar todo”, contó.
Luego sí “Tomy” habló de una situación a la que aún no le encuentra explicación. “Sigo sin entender qué pasó. Sé que cometí un error y me pasé en un frenaje, pero no sé por qué me sucedió eso. Y tuvimos la mala suerte de destalonar la goma que es lo que nos hace volcar después. Te pasa mil veces de irte afuera y no romper nada… En ese momento seguí yendo fuerte y arriesgando. Si era la primera fecha, parás y cambiás la goma. Pero acá era a todo o nada”.
“Sabía que con la ventaja que traía nos iban a descontar en los dos tramos finales pero igualmente nos iba a alcanzar. Encima a ese tramo lo conocía por haberlo corrido antes. Quizás eso me jugó en contra, porque en los otros iba más concentrado al no conocerlos”, agregó el tucumano.
Con ese abandono del piloto de la Compañía General de Rally, el cetro le quedó servido a su rival David Nalbandian. “No es solo por perder el campeonato, sino que más que nada me duele por el equipo que se merecía festejar un título. De diez carreras, paré solamente en dos y en ambas fue por errores míos. Muchos esperaban que me vaya bien y lo arruiné. Hay que asumir las culpas. Y lo que lamento es la destrucción del auto porque me perjudica mi futuro”, comentó.
Eso sí, ya avisó que no piensa tirar la toalla: “El apoyo del público me está llevando ya a trabajar para el 2017. Y estoy agradecido al equipo que me perdona las macanas. Eso me motiva. Prefiero tener el auto destruido pero contar con el apoyo de la gente; eso vale más que todo. Vale más ganar eso, aunque obviamente me hubiese gustado festejar el campeonato”, aseguró. “Hoy que me digan de seguir, de no bajar los brazos y que me manifiesten que se sienten identificados conmigo, es un orgullo y un gran honor; algo que me lleva a meterle mucho huevo. Y eso pienso que es algo que me lo he ganado yo solo. Estoy en un lugar privilegiado. Antes me pasó de estar en otro lugar, de estar apoyando desde el camino a otro representante tucumano (en su caso, a Roberto Sánchez) y sé cómo es; por eso siento que tengo la obligación de seguir por esa gente”.
Y al momento de hacer un repaso de su temporada debut en la clase mayor, García Hamilton reconoce que la nota es alta: “El balance es muy bueno. Encaramos la temporada con auto, equipo y navegante nuevo (Luis Catalfamo), pero los resultados llegaron más rápido de lo pensado. Tal vez no sumamos los puntos necesarios al comienzo del calendario, porque los puntos de la primera valen igual que los de la última. Pero hay que pensar y rescatar el nacimiento de algo que tiene futuro. Nadie se imaginaba esto a fin de año. Se dieron cosas muy buenas, ganamos cuatro carreras, se sumaron sponsors… Hay que capitalizar todo lo bueno logrado este año. Ahora estamos pensando en resolver el tema del auto. Quiero estar desde la primera fecha del año que viene, aunque soy consciente de que será difícil”, manifestó.