Castellano cerró un destacado torneo
Jonatan Castellano dio hasta lo que no tenía en San Juan para pelear por el campeonato, terminó segundo en la última final del año de Turismo Carretera disputada en el autódromo de Villicum, San Juan, y se volvió a Lobería feliz y sin nada por reprocharse. Pintará el 8 en los laterales de su Dodge.
El de Lobería a bordo de la unidad preparada por el Castellano Power Team comenzó la mañana dominical largando la serie en punta, a la par de Mauricio Lambiris, quien aprovechó su buena partida para doblegarlo. Así, «Pinchito» se mantuvo segundo intentando atacar al uruguayo durante los 4 giros, para finalizar en la posición de escolta.
Así con chances reales, pero dependiendo del triunfo y de como le fuera Mariano Werner, largó luego la final en la cuarta posición que mantuvo tras los primeros giros de una final con dos pace car iniciales. En el segundo tras la relargada, Castellano pudo tomarse revancha de Lambiris y lo superó en buena maniobra, para luego irse con todo a la posición de Juan Pablo Gianini, sobre quien pudo avanzar tras la mitad de carrera. Así, intentó luego recortar la diferencia que llevaba Agustín Canapino en los giros finales, pero fue imposible llegar a la cola del Chevrolet, por lo cual Jonatan debió conformarse con completar los 20 giros en un gran 2do puesto. El campeonato en definitiva, quedó en manos de Werner (Ford).
Mostrando un gran rendimiento en la instancia final, Castellano quedó posicionado segundo en la «Copa de Oro» tras sumar 133,75 puntos, mientras en el campeonato regular finalizó octavo con 302,75 unidades, por lo cual pintará el número 8 en los laterales de la Dodge.
Luego del Premio Coronación, Jonatan dijo: «Caímos de pie en la lucha por el campeonato. Entregamos todo en la final, pudimos avanzar hasta el segundo puesto pero quedamos lejos de Canapino en las últimas vueltas. Pusimos lo que había para descontar, esperábamos un pace car y no entró sobre el final, pero dimos todo lo que teníamos y me voy contento con el podio y con la conciencia tranquila a Lobería. Agradecido a todo el gran equipo que tengo, a mis mecánicos, Sebastián Prósperi, Aldo Tedeschi, ‘Tuki’ y José Villar en los motores, al grupo de sponsor que nos ha acompañado en un año tan particular y difícil, a mi familia por el aguante, a todos los amigos, a la hinchada de Dodge y todos sus distintos grupos, y a la gente de Lobería. Pintamos el 8 en los laterales de la ‘naranja’ después de una buena segunda mitad de año, y vamos a intentar ir por el uno el próximo. Siempre vamos a ir a buscarlo, Dios quiera que alguna vez se de».