"No lo podía creer, parecía un sueño"
Uno de sus mejores tareas en la clase mayor de la potente categoría, enhebró el representante de Tandil, y Vela, con los motores de Juan Villamayor, y la asistencia del Team RF Competición.
«Rei» Fernández, desde los entrenamientos del sábado en La Virgen del Camino de Lobería, sabía que contaba con un vehículo para ser relevante protagonista el fin de semana, en el trazado del Club Jorge Newbery.
La aparición y el despliegue del «Mataco» López y Islas, con el Valiant-Chevrolet, fue el escollo más delicado de vulnerar por el ganador, a tal punto que el ex piloto de la «Promo» manejó las acciones, y sólo le faltaba la última acelerada, hasta la infidelidad del distribuidor, con la cuadriculada a la vista.
Fernández, estuvo en los dieciocho episodios, detrás del otro serrano, trató de incomodarlo en varios tramos, hasta se había convencido que el resultado era muy bueno, pero recordó que no hay que bajar la guardia, hasta que no cae la bandera, y tuvo su premio, y vaya que recompensa. Un tributo irrepetible. El objetivo le costó lágrimas, debiendo «pelar» temple, y una particular tenacidad.
«No lo podía creer, parecía un sueño. Luego de la última variante, los dos fuimos para el mismo lado. Todo resultó muy rápido en ese último instante. Era mi primer triunfo. Un día muy feliz. Nos costó mucho, hace un largo tiempo que estamos en APAC, y por una cosa u otra, se fueron escapando muchas chances. Felizmente se pudo dar en Lobería. Tenemos un gran auto, se ha trabajado intensamente desde el verano, Juan Villamayor en los motores, Juan y José Jará en el chasis, la tarea y la asistencia de Christian (Arias), Generoso (Trejo), mi hermano «Nacho» que esta de vacaciones, y toda mi familia, que me ha estimulado desde el primer día, y en los momentos dificiles. Todo esto es para ellos, y para los que deseaban esta victoria«, le comentaba Reinaldo Marcelo Fernández a www.vertigomotorsport.com.ar.