La magia del semipermanente

Hace solo 33 años, el TC «rodaba» por última vez en las sierras más antiguas del planeta. Ese día, se concretaron dos parciales, obtenidos por Juan Manuel Landa con Dodge y el local Fabián Andrés Acuña con Ford. En la general por suma de tiempos, el marplatense Landa fue el vencedor en la edición final del TC en un sitio con prolífica historia para los carreteros.

Es historia una de las carreras emblemáticas que tuvo el TC en su último tramo de competencias en rutas. Hace 33 años se disputaba la última edición teceista en el cautivante semipermanente de Tandil, en las adyacencias a la ciudad serrana en una zona comprendida por la ruta 74 y el dibujo de lo que hoy es la zona turística cotizada de las serranías.
El domingo 8 de marzo de 1992 se corrió por última vez en el increíble trazado, transitando por lugares inolvidables que siguen vivos pero ya sin carreras, como la bajada de ‘Belén’ en la entrada del actual complejo El Centinela, la curva de La Casa, hoy transformada en una rotonda con un coqueto «restó»de campo, la curva del viejo dique en la llegada a la quinta del San José, la vivorita antes de llegar al empalme con la 74, Scarminacci, El Gallo, la curva de La Granja. Todos lugares que hoy existen y pueden ser recorridos y que en aquel momento, hace más de tres décadas, fueron claves en las enloquecidas carreras del TC rutero. Eran 32 kilómetros de una vuelta interminable, que avisaba de la llegada de los autos cuando los aviones se recortaban en el cielo y anticipaban que los punteros estaban cerca. Las carreras eran difíciles para correrlas, y hay que decirlo, no todos los pilotos se sentían a gusto con las curvas, bajadas y largas rectas al filo de los 280 kilómetros de velocidad. También era una carrera difícil para el público porque era tan larga la vuelta que no pasaban seguido y había que disfrutar cada paso como si fuera el último. En la fecha que fue la caída del telón de su historia, en Tandil se corrieron dos series a cuatro vueltas cada una, es decir que en total la multitud en los alambrados vería pasar ocho veces a los autos.
En aquella oportunidad con dos series por suma de tiempos, largaron 71 autos en la corta recta principal frente a los boxes, cerca de la entrada de la zona de La Cascada. La primera serie la ganó el marplatense Juan Manuel Landa con un Dodge en casi 45 minutos de competencia, escoltado por José María Romero con otro Dodge a casi 11 segundos. Luego llegaron los locales José Malisia con Chevrolet y Fabián Acuña con Ford, ambos delante de ‘Lalo’ Ramos con otro Ford y ‘Cocho López’ con Chevrolet. La serie tuvo una vuelta previa accidentada ya que por un toque quedaron afuera Juan De Benedictis y Raúl Edgardo Lavari. El más ganador del historial en Tandil, Roberto Mouras con un problema en un balancín quedó 44º con su Chevrolet mientras que el actual presidente de la categoría Hugo Mazzacane era 25º con Dodge.
En la segunda serie la victoria fue para Fabiàn Acuña con Ford, en 45 minutos de competencia, con José Malisia con Chevrolet como escolta en lo que fue 1-2 de Tandil en la despedida del circuito serrano. Luego llegaron José María Romero con Dodge, Juan Manuel Landa con Dodge y Emilio Satriano con Chevrolet. La segunda serie tuvo a 50 autos en línea de largada y fue abandono para Mouras por rotura de motor y López con problemas de frenos. El récord de vuelta de la carrera quedó en manos de Landa con un promedio que llegó a los 176 kilòmetros en la hora con un giro de más de 11 minutos, en el trazado que ya tenìa cuatro chicanas muy lentas para cortar las largas rectas de plena velocidad.
La clasificación final general terminó con victoria para Landa con el auto preparado en aquel entonces por los hermanos Bozzone, Carlos Papovich y por Carlos Aberasturi habitual acompañante. El de Mar del Plata ganó la carrera empleando 1 hora 29 minutos 59 segundos y dejó como escolta al Chueco Romero por 9 segundos, y a Fabiàn Acuña por 11 segundos. Josè Malisia, Luis Minervino, Tito Urretavizcaya, Jorge Oyharant fueron quienes le siguieron en aquella interminable fila de autos que llegaban al banderazo final sin saber que era la despedida real de uno de los circuitos más fasciantes que utilizò el automovilismo argentino. Se fue Tandil, y con ello un pedazo enorme de historia de TC en esas rutas. Roberto Mouras ha sido el màximo ganador en sus 21 ediciones, seguido por Oscar Castellano y Juan Marìa Traverso quienes ganaron tres veces cada uno. Aquellos 32 kilòmetros no se olvidan, ni sus carreras, ni su gente, ni sus ganadores, ni sus curvones, sus rectas, sus dibujos, sus tragedias, y sus emocionantes finales. Tandil es historia. Y a veces se hace difícil explicar aquella magia del TC en ruta. Pareciera un cuento de ficción y por eso para quienes lo vivimos en carne propia en aquella época nos parece un recuerdo perdurable y único. Hasta mágico.

FINAL POR SUMA DE TIEMPOS- TC EN TANDIL, 8 de marzo 1992
1º Juan Manuel Landa (Dodge) 1h 29m 59s193/1000
2º Josè Marìa Romero (Dodge) 1h 30m 08s 395/1000
3º Fabián Acuña (Ford)
4º José Malisia (Chevrolet)
5º Luis Minervino (Chevrolet)
6º Tito Urretavizcaya (Chevrolet)
7º Jorge Oyhanart (Ford)
8º Roberto Zavaleta (Dodge)
9º Osvaldo Lynn (Ford)
10ºEduardo Nicieza (Chevrolet)

Nota especial del Director de Vértigo Motorsport, Luis Orlando Sanchez

***

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *