Príncipe solidario por la ruta del Dakar
La grandeza del príncipe qatarí Nasser Al Attiyah se puso nuevamente en evidencia. Hay quienes miden la grandeza en cuanto a la cantidad de riquezas que tiene o cuanto dinero tienen en el bolsillo, pero también por lo que uno puede dar, mucho o poco, desinteresadamente y con el objetivo de ayudar.
Nasser donó ayer 100.000 dólares a la organización Techo para que esta continúe con su labor solidaria en nuestro país y también en los países por donde compite el Dakar. Al Attiyah le entregó un cheque simbólico a la entidad que es sponsor solidario del Dakar. No es la primera que vez que el príncipe realiza estas acciones desinteresadas y en ayuda, ya que se repiten año a año.
“Como competidor de esta carrera, he podido visibilizar la realidad de extrema pobreza en que viven miles de familias en los países en los que el Dakar ha transitado. Debido a esto, extiendo la invitación a más corredores, para que contribuyan a la superación de la pobreza”, declaró Al Attiyah en la ceremonia que se realizó ayer en el vivac del Centro de Convenciones.
La cifra que aportó el qatarí se suma a la que donó la Amaury Sport Organization (ASO), organizadora de la prueba más dura del mundo. La donación fue de 112.000 dólares. En total, Techo sumó 212.000 dólares en la jornada de ayer y desde que el Dakar se corre en Sudamérica se han acumulado más de 700.000 dólares para ser destinados a la construcción de viviendas y otros proyectos.
Para la gente, Al Attiyah es el “príncipe del pueblo”. “A lo largo de mi recorrido por Argentina he podido ver y sentir el afecto de la gente. Me han recibido con banderas, carteles y muchas otras señales de cariño que hace de esa gente algo especial”, agregó el qatarí que compite en el Dakar con un Mini. El público eligió a Nasser como uno de sus preferidos tanto por su trayectoria como también por las acciones solidarias que realiza en todo el mundo.
La labor de la organización Techo
En nombre de Techo, Leonardo Báez explicó que la entidad busca hacer una analogía al trabajo constante y coordinado que las comunidades realizan para superar la situación de pobreza en que se encuentran. En Latinoamérica, de acuerdo a cifras de UN-Habitat, más de 110 millones de personas viven en asentamientos humanos.
Por su parte, en representación de uno de los asentamientos, Paola Ruiz, del asentamiento La Cerámica de nuestra ciudad, explicó parte del proceso que vivieron con los vecinos de su barrio mediante el trabajo constante para buscar soluciones a sus problemáticas. “Es hermoso participar y ser parte de Techo. Lo que hicimos los dos, vecinos y voluntarios ha traído muchos beneficios para el barrio. Antes no nos conocíamos y después de las primeras reuniones hay más diálogo y nos conocemos más. Ha sido muy lindo”, declaró.
A través de sus distintas actividades, Techo busca que quienes participan del rally se comprometan con una sociedad más justa, desafío que hoy tiene sólo en Latinoamérica a 164 millones de personas viviendo con escasos recursos.