El TC cumple 83 años

Una trayectoria apasionante a lo largo de 83 años. Un 5 de agosto de 1937 el Turismo Carretera iniciaba una prolífica y rica historia de pasión hasta convertir a la categoría en una de las más longevas del automovilismo mundial, con pilotos que han quedado en la memoria de la gente, desde Angel Lo Valvo a los nombres actuales.

Y fue precisamente el hombre de la cuna de campeones, Angel Lo Valvo, con un Ford V8, el primer ganador del TC, en el Gran Premio Argentino, que se disputó entre el 5 y 15 de agosto de 1937, y atravesó doce provincias en diez etapas, con un recorrido total de 6.894 kilómetros.
Dos años después, se creó el TC en reemplazo del Campeonato Argentino de Velocidad y el arrecifeño Lo Valvo, con el seudónimo de «Hipómenes» , se consagraba campeón, tras luchar con emblemáticas glorias como el «Aguilucho», Oscar Gálvez, Ricardo Risatti, Juan Manuel Fangio, Domingo Marimón y Eusebio Marcilla, entre otras.
Luego, llegaron los títulos de Juan Manuel Fangio, con Chevrolet, en 1940 y 41, los dos de Oscar Gálvez en 1947 y 48, y la seguidilla de coronas de su hermano Juan (49, 50, 51, 52, y después 55, 56, 57, 58 y 60), que ningún piloto pudo superar hasta hoy.
El TC se fue forjando a través de su espíritu federal, de aquellas épocas del taller, aventura, y pasión. Tiempos de rutas, circuitos de tierra y asfalto, tiempos de peñas para colaborar con el «crédito» de la localidad.
Y llegó el 30 de agosto de 1960, fecha que se reunieron un grupo de pilotos para fundar la ACTC, y tras desistir el campeonisimo Juan Gálvez a la presidencia, su lugar lo ocupó Plinio Abel Rosetto.
La primera carrera organizada por la ACTC fuera de la órbita del ACA fue el 9 de julio de 1961 en el autódromo Municipal de la Ciudad de Buenos Aires, hoy Oscar y Juan Gálvez, y el ganador fue Julio Gelón Devoto «Ampacama», con una cupé Ford V8.
En 1964 apareció un Chevrolet Nova, el «400» argentino, y revolucionó al TC ante el asombro de los defensores de las legendarias cupecitas, y de la mano del gran «Pepe» González y los hermanos Aldo y Reinaldo Bellavigna, los preparadores de Saenz Peña, le dieron a Jorge Enrique Cupeiro un medio para ganar.
La aparición de los Torino el 26 de febrero de 1967 en San Pedro marcó otra etapa memorable de los carreteros, con la mecánica del «mago» Oreste Berta. El cordobés Héctor Luis Gradassi ganó aquel desafío en la ciudad bonaerense a orillas del Parana. Llegaba al TC, una escuadra emblemática, que denominaron la CGT (Eduardo José Copello, Héctor «Pirín» Gradassi y Jorge Juan Ternengo).
Luego vinieron épocas de cambios tecnológicos en el TC, con el advenimiento de los prototipos en el crepúsculo de los 60, y más tarde los autos emblemáticos como los Falcon, las Chevy, Dodge y Torino fueron marcando una tendencia.

Luis Orlando Sanchez

 

 

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